RESUMEN DEL III CONGRESO INTERNACIONAL DE JUSTICIA RESTAURATIVA

El III Congreso Internacional de Justicia Restaurativa y mediación penal que tuvo lugar los días 27 y 28 de marzo en Burgos, una vez más, convirtió a Burgos en la ciudad de la justicia restaurativa y congregó a más de 150 profesionales y expertos en torno a la figura de la justicia restaurativa y sus diferentes herramientas como la mediación penal.
El objetivo de este congreso era doble, por un lado profundizar en las diferencias entre justicia restaurativa y otras instituciones afines como la mediación penal, y por otro constituir una llamada de atención al legislador para que por fin, se pueda plasmar en nuestro derecho interno. En el acto de inauguración estuvo presente el Excmo. Fiscal Superior de Castilla y León, don Manuel Martín-Granizo, el Rector Magnífico de la Universidad de Burgos, el director de los Servicios Jurídicos de la Junta de Castilla y León, los codirectores del Congreso y una asesora de la Secretaría de Estado de Justicia, doña Silvia Martínez Cantón.
Manuel Martin-Granizo alabó esta tercera edición y la labor del servicio de mediación penal-amepax, pionero en Castilla y León y coorganizador del Congreso mientras que resaltaba la necesidad de una regulación en la ley que dote de mayor seguridad y eficacia las iniciativas existentes. Algo que se vio corroborado por la representante de la Secretaría de Estado de Justicia, doña Silvia Martínez Cantón, ella expresó el deseo del Ministerio de regular esta institución y así plasmar la directiva sobre derechos de víctimas de 25 de octubre de 2012. La buena noticia es que parece que el Estatuto de las víctimas, verá muy pronto la luz, en el cual se incorporará una breve referencia a la Justicia Restaurativa y a los derechos de las víctimas, algo por lo que siempre ha luchado las dos entidades organizadoras Amepax y la Sociedad Científica de Justicia Restaurativa, representadas en la figura de su presidenta Virginia Domingo de la Fuente.
Esto será un pequeño gran paso que debería verse avalado con un posterior desarrollo normativo en el futuro código procesal penal, un texto un poco más complicado y que los expertos allí reunidos esperan se pueda concretar antes de las próximas elecciones.
Partiendo de la idea de que la Justicia Restaurativa nace desde el momento que alguien sufre un delito, por tanto el centro es la víctima y ayudando a esta, también se va a ayudar al infractor, la primera parte del Congreso estuvo dedicada a cómo la justicia tradicional contempla a las víctimas y qué mecanismos favorecen la atención de sus necesidades, para ello se contó con expertos como una fiscal de la Fiscalía de Burgos que además colabora con el Servicio de mediación penal de Castilla y León-amepax y la Juez Decana de Burgos.

 

Posteriormente, expertos ya en Justicia Restaurativa como Virginia Domingo y el criminólogo Guillermo Porta, concretaron cómo la Justicia Restaurativa puede suponer un plus de ayuda a los afectados por el delito: victimas, infractores y comunidad. Se apostó durante estas dos charlas no solo por los encuentros restaurativos bajo la fórmula de mediación penal, conferencias o círculos sino por una justicia penal con enfoque restaurativo más humana y cercana a los ciudadanos que tenga en cuenta las necesidades de las víctimas de ser escuchadas e informadas durante todo el proceso y promueva la reinserción de los infractores.
Y la tercera parte del Congreso contó con la experiencia de la fundación Terre des hommes y Tutator, representados por Fabrice Cregut y John Orlando, en países como Nicaragua y muchos otros. Esta fundación trabaja la justicia juvenil con enfoque restaurativo y supone un paso más en diferentes lugares del mundo, donde han visto que el endurecimiento de las penas no supone la panacea de los problemas y han constatado que la inversión en programas restaurativos favorece la paz social y disminuye la delincuencia, lo que se traduce en ciudadanos más satisfechos con la Justicia.
Por último se ofreció un espacio para comunicaciones que versaron sobre la justicia restaurativa, sus posibilidades como la mediación escolar y policial y cómo debería implementarse en nuestro derecho.
Como conclusiones las dos entidades organizadoras Amepax y la Sociedad Científica de Justicia Restaurativa destacarían lo siguiente:
La necesidad de continuar la buena relación con el Ministerio de Justicia para seguir asesorando en cómo podría articularse una buena regulación. Los que practican la justicia restaurativa en el día a día son los más indicados para este asesoramiento puesto que conocen cómo repercute en el ciudadano y que beneficios no deben perderse en una regulación muy exhaustiva.
La Justicia Restaurativa debe ser el centro de la futura regulación, sin perjuicio de que se contemplen diversas formas de ponerla en práctica como la mediación penal, los círculos y las conferencias restaurativas. Todo esto sin desechar la idea de una normativa penal y penitenciaria con enfoque restaurativo que favorezca la reparación de las víctimas y su potenciación como parte importante en el proceso y que promueva la responsabilización del infractor como paso previo a su reinserción.
Las diferentes herramientas restaurativas deberían poder ofrecerse tanto en delitos leves como a los más graves. Para los pequeños delitos funcionaría como una alternativa al proceso penal, dejando la entrada al principio de oportunidad. Sin embargo, no se debería perder la perspectiva de que la Justicia Restaurativa también puede y debería poder aplicarse a delitos más graves, y en estos casos sería un complemento al proceso penal que no evitaría el juicio, si acaso lo reduciría pero supondría una gran ayuda a la víctima para superar el trauma del delito y un paso para la futura rehabilitación y vuelta del infractor a la comunidad. La regulación debería no limitar la aplicabilidad a determinados delitos sino tener en cuenta cada caso concreto y las circunstancias personales de víctima e infractor.
El III Congreso Internacional de justicia restaurativa y mediación penal en Burgos se clausuró con el afán de continuidad y con la esperanza de que en la siguiente edición, algunas de las expectativas de este, se hayan visto cumplidas como la futura regulación legal.